Militar detenido por abuso infantil y producción de material pornográfico

Una tarjeta de memoria perteneciente al militar en servicio activo hallada en un bus destapó la red de abuso. Además, el servidor abusaba de sus hermanos de 6 y 8 años. Estos actos eran grabados y distribuidos en distintos grupos y chats.

Un militar en servicio activo fue detenido en Morona Santiago por su implicación en un escalofriante caso de abuso infantil y producción de material pornográfico. Su captura se logró luego de que una pasajera encontrara una tarjeta de memoria en un bus interprovincial y la entregara a las autoridades. En el dispositivo, los agentes descubrieron una gran cantidad de videos de abuso sexual infantil, lo que desató una intensa investigación que llevó a su arresto y al rescate de dos menores, quienes resultaron ser sus propios hermanos de 6 y 8 años.

La Unidad de Ciberdelitos de la Policía Nacional y la Fiscalía realizaron un seguimiento exhaustivo durante tres meses para identificar al responsable. Los peritos lograron rastrear el origen del material, lo que permitió ubicar la vivienda de las víctimas en Latacunga, provincia de Cotopaxi. Posteriormente, se determinó que el principal sospechoso era un militar en servicio activo, quien prestaba funciones en Patuca, en la provincia de Morona Santiago.

Con esta información, la Policía organizó un operativo que culminó el 02 de abril con la captura del uniformado dentro de un cuartel militar. Durante el allanamiento a su vivienda, los agentes encontraron más evidencia digital.

El teniente coronel Gonzalo García, jefe de la Unidad Nacional de Ciberdelitos, confirmó que las pruebas médicas realizadas a los niños corroboraron los abusos. Además, se determinó que el detenido no solo agredía sexualmente a sus hermanos, sino que también grababa los actos y compartía los videos en distintos chats. Las autoridades investigan si el material también era comercializado en redes de explotación infantil.

Dada la magnitud del caso y la cantidad de contenido encontrado, el militar era considerado un objetivo de intermedio valor por la Unidad de Ciberdelitos. Se presume que llevaba al menos dos años cometiendo estos delitos, mientras se desempeñaba en su cargo dentro de las Fuerzas Armadas.

Las investigaciones continúan para determinar si hay más involucrados en la distribución del material y si existen otras víctimas dentro de su entorno cercano. Mientras tanto, el detenido enfrenta cargos por violación y producción de material de abuso sexual infantil, delitos que podrían llevarlo a enfrentar una pena ejemplar.